En un plan estratégico se exponen los planes de negocio para alcanzar objetivos, pero sin una implementación adecuada, queda en una simple lista de buenos deseos.
Entre los pasos que podríamos aplicar esta:
-Evaluación: Es importante revisar el documento para asegurarnos su viabilidad, ya que podría ser excesivo en los costos, tiempo o dinero.
-El plan b (ideas de respaldo) es importante en caso de que el plan original falle. Crear una visión para la ejecución: Puede constituirse por una serie de objetivos compartidos donde todos los involucrados sepan que se espera del resultado final; es decir, la imagen de lo que el plan estratégico pretende llevar a cabo debe ser más que clara.
-Selecciona los miembros del equipo: Aquellos que participen deben contar con las capacidades y la disponibilidad para la implantación. Se establece un jefe de equipo con capacidades de liderazgo.
-Programar reuniones sobre el progreso: A partir de la lista de metas u objetivos el equipo debe identificar los logros y evaluar los avances, así como los cambios pertinentes. Es recomendable establecer un sistema de recompensas para los involucrados.
-Involucrar a la alta dirección: Los ejecutivos deben permanecer informados de los avances para que sean una parte del proceso, así en frente a cualquier eventualidad, la gestión estará en mejores condiciones para afrontarla.